Diccionario de Sinónimos e ideas afines, Antónimos, Parónimos y Diccionario de Rima
- Ripollet-Barcelona: Limpergraf: 2002
- 442 paginas ; tapa blanda ; 21.05 x15 centimetros
Diccionario con más de 150, 000 equivalencias de las 12,000 palabras de uso frecuente con sus correspondientes.
El conocimiento de la Sinonimia de la lengua castellania proporciona un ri- quísimo tesoro de voces pintorescas, expresivas y variadas; anima la imagi- nación y la estimula al mismo tiempo. Asimismo, allana la construcción de fra- ses, evitando repeticiones monótonas o poco armoniosas, y suministra seguros medios para captar bien el sentido de cualquier lectura. La Sinonimia enseña a conocer las analogías y diferencias de las voces, y a usarlas con precisión y oportunidad; facilita el estudio de cualquier rama del saber y, más importante aún, pone al hombre en condiciones ventajosas para expresar sus pensamientos con soltura, variedad, sencillez y corrección. Lo mismo cabe decir de los Antónimos (colocados en cursiva a continuación de los sinónimos) y los Parónimos (en un apartado especial), que ayudan a ampliar extensamente el léxico de todo ser humano. En este Diccionario se ha procurado dar a toda la exposición de vocablos la máxima claridad y justeza, evitando una desmedida extensión en un campo que es fértil para ello. No hemos creído necesario ni conveniente emplear palabras rebuscadas u obsoletas, que sólo servirían para impedir la deseada claridad del vocabulario, pero hemos mantenido algunas voces muy comunes en algunos países latinoamericanos. No es preciso aclarar la utilidad de un Diccionario de la Rima, pero así como a través del Diccionario de Sinónimos el versificador puede hallar una serie de vocablos que encajen perfectamente en el esquema métrico a que se somete, a través de aquél se le ofrecen las terminaciones que puede precisar en un momento dado. La utilidad de este diccionario es mayor de lo que generalmente se supone. Una simple ojeada a cualquiera de sus columnas sugiere una serie de posibilidades poéticas perfectamente aplicables, y, al propio tiempo, da idea de lo reducido y restringido de ciertas rimas, a las cuales a veces sólo corres- ponden dos o tres palabras. Más aún, existe una gran número de vocablos que no tienen consonante, a los cuales los tratadistas llamaron "voces fénix", pues del mismo modo que se creía antiguamente que el ave fénix era única en el mundo, únicas son las rimas de estas palabras: el mismo vocablo fénix lo es, como ónix, Venus, etc. El conocer estos hechos es cosa de gran utilidad para el que empieza a seguir el camino de la poesía.